Amigo

angustiado por la ausencia de si mismo en su presente, sin saber si va o viene, se sienta al pie de su escalera, con ojos sombrios y deprimidos esperando una señal, llora quizas buscando un consuelo, es estar como no estar, es sentir como no sentir y mirar como no hacerlo, saliendo el humo del tabaco por sus labios, lamenta quizas el destino tan dificil que se le hace, una señal aparece, de alguien que viene caminando en una senda quizas no tan sombria como la de el, pero que siempre aparece en momentos duros, llamando asi su atencion y haciendole olvidar su pena por un momento, prende un cigarro con el, y le habla sobre la vida, mientras sus mejillas se retraen para asi formar una sonrisa, bajo la luna de febrero, que aprende con el, que la vida puede ser amarga antes de ser dulce, que hay que dejas fluir las penas, que mejor que con quien te entiende, dando un consejo que es llevado por el mismo aire frio que congela sus manos, viendo el mismo cielo que ve a su lejana pena, pero a la vez lo acerca tanto, la tristeza se va, luego de la congoja, se siente aliviado, sintiendo que la vida siempre te sonrie...hay que saber ver esa sonrisa...no siempre es amigable a ojos que no creen, mas lo sera siempre para los que saben lo generosa que es...se pone de pie, sabendo que su pena esta ahora calmada, mientras el va desapareciendo junto con el humo del cigarro...le agradece...a su amigo.